Algún

11.07.2017 11:24

En algún lugar de este ancho mundo, que gira por la inercia que provocan miles de almas perdidas buscando encontrarse; a pesar de que la mayoría camina con los zapatos rotos de tanto tropezar en el camino, no se detienen, por el contrario, se mantienen en movimiento, dispersamente al unísono de un cántico de lucha; por allí en algún punto de la línea de tiempo y espacio, sé que encontraré la oscuridad de tu mirada, como siempre sólo tendrás para ofrecerme la profundidad de tu superficie, esa que nadie comprende, que está a simple vista, como si yo no la conociera y supiera como traspasar esas barreras.

Entonces nos mentiremos al comienzo como es costumbre, luego sabiendo que nos mentimos las verdades se dejarán entrever, es como una danza de dragones, llamaradas de fuego que van y vienen, fauces cerrándose de golpe y con furia, que luego solo son movimientos amenazadores y que al final marcan un compás, ilógico ante los ojos del mundo, pero perfectamente compresibles solo ante nuestros corazones; ésos que guardan tantos secretos de la otra parte, memorias invaluables, tristezas inigualables, alegrías inmensurables, cariño inexplicable; son tantas cosas que tienen peso, lo sabemos, y por eso sé que nos debemos un ratico que dure varias horas, no para volver a ser lo que nunca fuimos, sino porque tenemos lágrimas que nos pertenecen y que nos debemos, un proverbio árabe dice que “todo lo que sucede dos veces, sucederá, ciertamente, una tercera”, lo sabemos, lo hemos vivido, lo viviremos cada vez que nuestra estrella favorita deje de brillar, y los hilos que evitan que los nuestros se topen, se corten ante las tijeras del destino, no me sentaré a esperar que pase, pero la certeza que se encuentra acumulada en mi pecho palpitando sabe que así será, en algún momento cuando deje de esperarlo.